Y si la mayoría de quienes encontraron un empleo en el Plan E han vuelto al paro, ¿qué vino a contarnos la ministra Garmendia?

Garmendia y Cascallana en Alcorcón

Después de conocer que el paro volvió a subir en agosto. Después de saber que el 84% de quienes consiguieron un trabajo en el Plan Zapatero se han quedado en paro tres meses después. Después de constatar que aquello fue un parche que no sirvió para estimular la economía y apenas tuvo un efecto ilusorio. Después de que haya quedado claro que este tipo de medidas no son más que la ocurrencia de un populista incapaz que no sabe cómo afrontar la grave crisis que atravesamos. Después de ser conscientes de este monumental fracaso, ahora toca preguntarse qué vino a hacer la ministra Garmendia el sábado pasado a Alcorcón.
La respuesta es bien fácil. Cascallana, la ministra, la delegada del Gobierno, la portavoz socialista en la Asamblea y el secretario general del PSM vinieron a hacer el paripé y a montar el numerito propagandístico. Que le hicieran un importante desprecio institucional al Gobierno de la Comunidad de Madrid es probablemente lo de menos, lo verdaderamente grave es cómo tomaron al pueblo de Alcorcón, y a todos los madrileños, por idiotas a los que se les puede venir a contar cuentos chinos sobre las bondades de un plan que estaba abocado al fracaso porque no estaba pensado más que para servir de colchón estadístico que relajase el crecimiento desbocado del paro en los meses previos a las elecciones europeas. En definitiva, un burdo manejo propagandístico, otro maquillaje de la realidad de los que tanto gustan a Cascallana porque gustan tanto a Zapatero.
Por eso, mientras Enrique Cascallana aseguraba que el Plan Zapatero tenía “la virtud de crear empleo”, la ministra se atrevía a decir cosas como ésta: “el plan E lo que perseguía era una actuación muy específica con el empleo a corto plazo, de hecho se han generado más de 400.000 empleos, un 48% más de lo previsto inicialmente, en un momento clave para nuestro país porque estamos con una tasa de destrucción de empleo muy importante”.
O, refiriéndose a los cerca de 490 millones procedentes del Plan E correspondientes al Ministerio de Ciencia e Innovación, disparates de este calibre: “Estamos haciendo un estudio de actuaciones y hemos detectado que la inversión está generando un efecto multiplicador muy importante, con un empleo sostenible a medio y largo plazo, con impacto en la renta de las familias y en el valor productivo de las empresas, y con una especialización de nuestras capacidades científicas y tecnológicas”.
No señora Garmendia, no alcalde Cascallana, el Plan E, Plan Zapatero como le gusta decir al senador, dio trabajo a 100.885 personas en el mes de mayo de las que 84.985 ya habían vuelto a listas del paro en agosto. Eso no es crear empleo sostenible, ni tiene impacto en la renta de las familias, ni en el valor productivo de las empresas, ni estimula la economía. En todo caso ha servido para que 8.000 millones de todos los contribuyentes hayan sido malgastados en propaganda y en ineficacia.